Llevo más de veinte años conviviendo con perros, más de nueve formándome sobre ellos, y aun así todos los días aprendo algo nuevo sobre perros.
Mucha gente me comenta que siempre ha tenido perro y ha realizado las cosas de tal manera, con este argumento dan por hecho que ya saben todo lo necesario para convivir con un perro. Yo nunca negaré que la experiencia es un grado, pero tener experiencia no siempre te da dotes de conocimiento, o al menos, conocimientos correctos.
En mi casa siempre hemos tenido coche, obviamente un perro nada tiene que ver con un automóvil, pero para facilitar la comprensión te diré que tras 34 años de convivencia con coches a día de hoy se muy poco de ellos, aun teniendo formación en ello, ya que también tengo titulación de ciclo medio en Electromecánica de Vehículos jeje. Si mi coche falla, voy al taller. Si quiero conservarlo bien, me informo, contrasto, comparo y busco recomendaciones coherentes o pregunto a un profesional. Si quiero cambiarlo o adquirir uno, acudiré a un profesional en la materia que me asesore y recomiende cual se adapta mejor a mis circunstancias. Esto sería normal, con los perros, lo mismo.
Por tener toda la vida perra, no se sabe todo de perros, o incluso lo que hasta ahora pensé que era correcto, no lo es. De los errores se aprende mucho. Puedo informarme e incluso formarme, pero esto no asegura nada. Todo depende de dónde y cómo lo haga.
Si quiero incorporar un nuevo perro a mi vida debería saber que perro se adapta mejor a lo que busco, tener ciertos conocimientos sobre perros, para eso está el asesoramiento de profesionales… Si quiero mejorar la convivencia con mi perro igual necesito asesoramiento profesional y adquirir conocimientos. Pero ante todo debo buscar lógica y coherencia en todo ello.
Por eso lo primero que debería saber es que es un perro.
Así que vamos a analizar profundamente que es un perro.
Normalmente se define como: El perro (Canis familiaris o Canis lupus familiaris dependiendo de si se lo considera una especie por derecho propio o una subespecie del lobo), llamado perro doméstico o can, es un mamífero carnívoro de la familia de los cánidos, que constituye una especie del género Canis.
Con esta definición ya sabemos cosas importantes, de donde procede, como alimenta a sus crías, que es vertebrado, que reluga su temperatura, (homeotermo) de donde deben proceder sus requerimientos nutricionales y la especie a la que pertenece.
Ahora profundicemos en etología canina, la ciencia que estudia el comportamiento del perro. Una parte importante que deberíamos tener muy clara sobre la especie es saber cuáles son sus conductas normales y cuáles no. Este suele ser el primer motivo de conflicto entre humanos y perros.
Esta distinción es importante, porque un manejo amable que dirija a nuestro peludo en el sentido correcto, pero que permita desarrollar sus conductas sin que resulten una molestia resuelve muchos conflictos.
Aunque a veces habrá que «mirar para otro lado», ceder, si el esfuerzo de canalizar una conducta normal es demasiado grande en comparación con el beneficio de no sufrir dicha conducta. Pero sabiendo que tu perro es totalmente normal, por más que te ofendan algunas de sus costumbres.
Pueden existir problemas de adaptación de nuestro peludo, al fin y al cabo nosotros hemos decidido donde ha de vivir y con quien sin pedirle opinión. Problemas de adaptación al entorno, un estrés elevado, miedos…pueden dificultar llevar una vida normal. Su conducta puede considerarse alterada, quizás requiera de una comprensión y/o intervención más profunda y cuidados para encauzarse.
Conductas normales de un perro
Partiendo de que el perro es un depredador, carroñero doméstico y un animal gregario y social.
Por lo tanto, podría cazar su comida por medio de diferentes conductas, normalmente incompletas, según raza, agrupar presas (pastoreo), señalar, cobrar, perseguir, seguir rastros (caza) estas cualidades e instintos los tiene de serie, tienen una base genética diferente en cada individuo.
Para un perro cazar es normal, pero esto requiere mucha habilidad, práctica, suerte y energía. Por eso los perros tienen un plan B; carroñear. Para ellos es una oportunidad de completar su dieta o de sobrevivir. En el caso de los perros urbanos, esto se suele cambiar por basura. Es asombroso lo sucias que pueden estar las calles de las urbes. En el campo, los bichos muertos y excrementos son los candidatos para completar el menú. Asqueroso, pero totalmente normal.
En el caso de que es gregario significa que tiende a agruparse con otros individuos, en principio de su misma especie, al ser doméstico, admite con facilidad otras especies, sobre todo la humana. Si no hay nada «anormal» esto es un proceso sencillo y natural.
Que sea un animal social, implica que le gusta interaccionar con otras especies, esto sería lo normal.
Estos dos últimos puntos suelen ser una razón de conflicto, los perros llevan mal la soledad. Por otra parte, las relaciones sociales requieres de cierta habilidad, que se aprende. Si el desarrollo de esta habilidad no es correcto, tu perro se relacionará mal con otros seres vivos. Aislar a un perro del contacto de otros perros o personas suele generar desequilibrios y alteraciones de conducta. Un perro con autoestima y seguridad en sí mismo asimilara todo esto de forma correcta, de lo contrario puede necesitar mucho esfuerzo y dedicación mejorar todo esto. Anticipar todo esto está de tu mano.
Una vez asentadas las bases, veamos algunas conductas normales, pero normalmente molestas para los humanos:
- Masticar objetos
- Perseguir cosas en movimiento
- Comer basura del suelo
- Comer excrementos de otras especies
- Cavar hoyos
- Querer saludar/aproximarse a otros perros
- Buscar compañía humana
- Olfatear orina/heces de otros perros
- Lame orina de otros perros
- Comer vómitos
- Revolcarse sobre excrementos o animales muertos
- Oler el trasero de otros perros
- Oler los genitales de otros perros
- Ladrar
- Montar a otros perros
Si todo esto te interesa, quieres saber más sobre cómo entender estas conductas, como gestionarlas para que no sean un problema en el día a día con tu perro, sigue atento a este blog.
En próximos artículos analizaremos más en profundidad todo ello.
Recuerda, el perro es un animal gregario, social, cazador y carroñero. Eso explica muchas de sus conductas normales, que suelen ser consideradas como inadecuadas, pero entran dentro de los patrones etológicos de la especie.
Muchas de estas conductas son desagradables o inaceptables para los humanos. Se puede lograr un consenso en cuanto a su desarrollo, pero siempre debemos asumir que son normales, si tu perro las realiza él no tiene ningún problema. En tal caso el problema lo tienes tú.
Fantástico post
hay que completarlo jeje
Gracias!
Deseando la continuación entonces.
Muy cierto!! Y que poco se respeta todo esto!!!